Un autónomo tiene que aprender a cubrirse las espaldas en su negocio, para evitar inconvenientes, acumular impagos o tener que lidiar con clientes que se retrasan en abonar las facturas. Como si ya no tuvieras bastantes tareas por delante además de desempeñar tu actividad principal —del marketing a la gestión de proyectos, de la secretaría a la facturación—, solo te […]